¿Cómo saber si sufres de mala circulación y como mejorarla?

Uno de los principales problemas de una persona que padece diabetes es como se compromete la circulación de la sangre en las extremidades.

Este problema en particular se debe al daño causado por la alta glucosa en la sangre o las subidas de sangre que los particularmente las personas con diabetes padecen.

La sangre no debería tener glucosa extra, en una persona sin diabetes la glucosa se elimina al ser absorbida por el cuerpo la cual se almacena en las células o se guarda en depósitos de grasa que el cuerpo usa como reserva de energía. Esta glucosa o azúcar simplemente se queda ahí y se mueve por todo el cuerpo lo cual daña una infinidad de órganos del cuerpo, en especial las extremidades, las piernas, los pies, los dedos se ven grandemente afectados por la siguiente razón.

Entre más glucosa lleva la sangre más daña los vasos sanguíneos de las piernas y de los pies, la glucosa alta va endureciendo los mismos a la vez que los va volviendo más angostos, en otras palabras, los vasos se vuelven angostos y duros. Esto obviamente le resta efectividad en la circulación de esa área lo que puede causar una gran cantidad de daños derivados de la mala circulación, les nombramos algunas complicaciones que pudieran presentarse.

Se disminuye la capacidad del pie en sentir dolor:  el dolor existe por una razón, esta es para advertirnos que algo nos está pasando, que un área de nuestro cuero se está dañando o que nos hemos provocado una herida, el sistema nervioso nos avisa y de esa manera estamos advertidos de que tenemos que tomar una acción inmediata. Al tener mala circulación, el cuerpo va dañando las terminaciones nerviosas lo cual no nos permite sentir dolor, por ende, una persona puede sufrir una herida sin saberlo al punto de que puede infectarse si darse cuenta.

Los pies no pueden combatir efectivamente una infección: la sangre es básica para la curación de una herida, cuando esta sucede el cuerpo envía células (a través de la sangre) que producen colágeno lo cual cicatriza la herida, pero si existe mala irrigación, si la sangre no llega a su lugar pues obviamente es mucho más difícil que el cuerpo pueda cicatrizar o cerrar una herida efectivamente, muchos más si existe una infección.

Los pies se enfrían: otra situación que se da es que las extremidades se enfríen por la falta de sangre que las irrigue, simplemente esto causa incomodidad, normalmente las personas se calienta los pies con agua caliente lo cual puede ser realmente contraproducente puesto que a veces el agua es demasiado caliente lo cual causaría quemaduras.

La mejor manera sin duda de calentar los pies es con calcetines acolchonados o mullidos, no con agua caliente, esta incomodidad puede ser tal que no permita dormir a una persona.

Claudicación intermitente: puede pasar que algunas personas sienten dolor en las pantorrillas cuando caminan rápido o en una superficie dura, o suben una cuesta. lo más probable es que se le vaya el dolor si se detiene a descansar unos minutos, a esto se le llama claudicación intermitente otra condición derivada de la mala circulación.

Varices: finalmente los diabéticos somos realmente propensos a desarrollar varices por el endurecimiento de las venas del cuerpo, las varices no solamente son molestas, pueden causar dolor y son poco estéticas.

Entonces mantener una saludable circulación del cuerpo en los diabéticos nos evitara muchos problemas, no fumar, ejercitarse, dormir bien son los factores que más benefician a la buena circulación.

Es hora de cambiar, hora de tomar el control de vida, se Atlético siendo diabético ¡Atrévete!

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